Introducción
Examinando el repertorio de la música militar española e internacional, es curioso observar que el número de obras vocales e instrumentales dedicadas a ensalzar las distintas banderas nacionales es pequeño. La explicación de este fenómeno radica, en nuestra opinión, en el hecho de que el nacimiento del concepto de la bandera, considerada como signo representativo visible y materializado de un pueblo o nación no surge hasta que se desarrolla éste, es decir el de la nación que se gesta en el periodo histórico de la Revolución Francesa de 1789, pero no alcanza su total plenitud hasta pasado el primer tercio del s. XIX. Para esta fecha, el arte musical ya ha pasado el ecuador, Bach, Haendel y Beethoven han quedado atrás y con ellos la aparición de la mayor parte de los himnos nacionales europeos, que en muchos casos lo son no de una comunidad nacional total sino solamente de una parte como en los casos de Prusia, en Alemania, Inglaterra en el Reino Unido o Austria en el Imperio Austro – Húngaro.
En los primeros himnos nacionales apenas se hace referencia a la bandera, es a partir del proceso independentista de las naciones de Iberoamérica, comprendiendo entre los años 1814 y 1830, cuando empiezan a componerse himnos y canciones dedicadas a las respectivas banderas. A este respecto, cabe señalar el hecho de que algunos himnos hispanoamericanos centran su atención en el símbolo nacional más que en la propia nación.
En nuestros trabajos de investigación hemos observado que si bien la música militar, en términos generales, no ha fijado mucho su atención en la bandera como fuente de inspiración, ciñéndose casi exclusivamente a la composición de toques de honor para la misma, la música patriótica infantil y de las organizaciones juveniles políticas, Frente de Juventudes, Pelayos, Guardia Roja, Juventudes Hitlerianas, etc., si han dedicado una mayor atención al tema que nos ocupa. El recuerdo más lejano de nuestra niñez a este respecto data de 1939, en aquella fecha los colegiales entonábamos una canción que decía así:
“ Salve Bandera / de mi Patria, salve /
Que en alto siempre / desafía al viento /
Tal como un triunfo / por la tierra toda /
Te llevaron indómitos guerreros…”
Esta canción se interpretaba no recuerdo bien si al entrar o salir de clase. Posteriormente, a partir de 1940, este tipo de canciones de corte decimonónico fueron sustituidas en los colegios por las canciones – marcha e himnos del Frente de Juventudes, en los que la imagen y concepto de la bandera se repite con bastante frecuencia en composiciones como “Bajo las banderas imperiales” o “El Guión”, el propio himno de Falange Española de las JONS, el “Cara al sol”, alude en sus estrofas a las “banderas victoriosas”.
También la Comunión Tradicionalista ha dedicado bellas páginas a ensalzar y cantar a la enseña de la Patria, como en este himno dedicado “A la bandera”, que se escucha con la música de la “Marcha real” y cuya letra decía así:
“!Salve, salve! Bandera victoriosa
de la Tradición / emblema secular.
De sangre y oro, cubierta de gloria /
Que por defenderte morir es triunfar.”
En el campo ideológico opuesto, aunque por razones obvias no se han prodigado himnos y canciones a la bandera, existen no obstante algunas muestras de este tipo de composiciones, como por ejemplo “Bandera roja”, himno comunista italiano que dice así:
“!Avancemos a la revuelta! ¡A la revuelta! /
Bandera roja, roja bandera / ¡Avancemos!
Que en la revuelta / la roja enseña triunfará. /
¡Viva el comunismo y la libertad!.”
Composiciones militares dedicadas a la bandera
Como decíamos anteriormente, las composiciones militares dedicadas a la bandera son, en su mayor parte, de carácter instrumental: marchas, pasodobles, himnos y toques de ordenanza; esta característica es común a casi todos los ejércitos. Entre las marchas extranjeras cabe destacar las francesas de los periodos revolucionario y napoleónico, tales como “Saludo a los estandartes” y “Fanfarria de los estandartes y guiones”. Otras marchas militares relacionadas con la bandera que merecen citarse son: “Marcha tricolor” de F. Papy y “Marcha de la bandera” de Pares, francesas; “Bajo la bandera de Monfort”, austriaca, de Eric Hendl; “Flota la bandera alemana”, marcha de parada de las Waffen SS, y la vieja “Standartenweihe”, de Havemann, compuesta por este alemán en 1887.
De todas las marchas militares dedicadas a las banderas compuestas por autores extranjeros, la que ha alcanzado mayor popularidad a nivel internacional es, sin lugar a dudas, “The stars and stripes forever” (Estrellas y barras para siempre”, conocida entre nosotros como la marcha “Barras y estrellas”. Esta magnífica y espectacular pieza fue escrita en 1897 por Jhon Philip Sousa, el famoso compositor estadounidense a quien se deben alrededor de 140 marchas, en su mayor parte militares, motivo por el cual ha pasado a la posteridad como el “Rey de la marcha”.
En España el tema de la bandera no ha gozado precisamente de gran atención por parte de los compositores, apenas existen obras musicales sobre el particular. En el archivo del Cuartel General del Ejército hemos encontrado una marcha titulada “Frente a la Bandera”, cuyo autor no figura en el índice, y poco más. Curiosamente o quizá no tan curiosamente, en el Concurso de Música Militar convocado por el Estado Mayor del Ejército se presentaron al Premio “Tortosa 1984” dos excelentes composiciones: “Bandera de España”, de A. Fernández Sastre, y “Loa a la bandera”, de F. Jordá Biosca, que obtuvieron el primero y segundo premio, respectivamente, otorgados dentro del marco de los actos celebrados con motivo del II Centenario de la Bandera de España.
BIBLIOGRAFÍA
- BELOSILLO, Manuel: Tercio de Requetés Valvanera. Semblanzas y Canciones. Ed. Aportes XIX, Madrid, 1992, 380 pp.
- ARRIACA, José de: Cancionero de Juventudes. Ed. Doncel. Madrid, 1967, 309 pp.
- Colección de canciones de lucha. Edición facsímil. España, 1939. Ediciones Pacific. Madrid, 1980, 156 pp.
Antonio Mena Calvo.
Comandante de infantería (R)
